Va a mirarme otra que no soy yo En este espejo Dentro de menos de lo que espero Y solo le pido Que considere Esas peticiones Que le hice al destino Cuando ni tenía equilibrio Ni fe Ni ganas de dar explicaciones A quienes cuestionaban mis faltas.
6 comentarios:
Anónimo
dijo...
éste tan breve, REM tan extenso, y no sé con cuál quedarme.
vete haciéndole un hueco al nobel de literatura en tu casa.
olvida lo del decálogo, porque yo no puedo pedirte nada más; en todo caso, haz tu decálogo, que si me ha dado por proponértelo, será porque sé que podría hacerlo mejor.
6 comentarios:
éste tan breve, REM tan extenso, y no sé con cuál quedarme.
vete haciéndole un hueco al nobel de literatura en tu casa.
olvida lo del decálogo, porque yo no puedo pedirte nada más; en todo caso, haz tu decálogo, que si me ha dado por proponértelo, será porque sé que podría hacerlo mejor.
no sé si me explico... ay.
artista.
es mi amigaaa, eeeeh!!
clara es mi amigaaaa!!
:)
¿Permites otras miradas? ¿Claras?
Anita: ¿esa aseveración manifiesta propiedad, o el deseo de compartir? ¡Eh!
Besicos ;)
no hay amistad tan contundente que no tenga la chispa del amor...besos
El destino debe ser amigo del tiempo y está lloviendo. Besos clarividentes.
Un poema precioso y entrañable... seguro que como tu reflejo interior y exterior en el espejo.
Besos consideradores!
Clara, Clara, no dejes nunca que los calendarios y los espejos hagan negocios con lo que va quedando de ti.
Un abrazo súper.
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