domingo, 10 de mayo de 2009

De cómo me siento a esperar





1


Los sueños están hechos de aceite.

Así pululan libres.


La vida, en cambio, se hizo de fondo de río,

con sus piedras,

latas y cangrejos.






2


Tañidos de aire.

Así suenan mis latidos.

Son silencios de corchea

que hacen enloquecer a las cigüeñas

por no poder atraparlos al vuelo.


Anuncian noticias del limbo.


(que no son malas/ que no son buenas).


(que no duelen/ que no compensan).


Y a cambio te obligan a la espera.






3



A veces oigo un tren en mi oído izquierdo.


Qué inoportuno.


Justo ahora,

no puedo viajarme hacia dentro.




4



Estoy llena de fantasmas.


Cuando tenga alzheimer

utilizarán mis ojos

para miraros.


3 comentarios:

popker dijo...

mmm, que gustazo leerte!
me quedo con el 2

Jol dijo...

Esos sueños despiertas
el mundo mentado en mil unas
me intoxico inhalando tus fronteras velludas
despertándote antes del fuego de las metrallas
un mortero en la linea contra ti
las granadas sobre la raya de tus bragas
ataco furibundo la delgada línea contra mí
varios muertos la posibilidad de nacer
de la trinchera esconde el lunar azufre
por tu carnívora sangre aparezco caníbal en bayoneta
y escondite de nuevo bajo el fogonazo de la noche
adentro solo holocausto, entrañas y tus mis sesos en nuestras bocas napalm.

Reporte del General:

Se llama Guerra.
Todos muertos.
Se desintegra la Unión Europea.
¿A qué hora lo hacemos de nuevo?

Anónimo dijo...

Es bueno perder trenes de vez en cuando, trenes llenos de fantasmas.